• Me encantó la actuación de Clint Eastwood en Gran Torino. Hoy vi de nuevo la película. La encontré mejor esta segunda vez.

  • Mis pequeños achaques, no me han permitido sentarme a escribir agusto. La salud física siempre repercute en el ánimo mental para cualquier actividad.

  • Mi dentista, un hombrecito que me puso dos veces la anestesia en el paladar, porque la primera vez pensó que no había entrado completa, y la segunda vez me dijo: “Al parecer si entró bien la primera vez… ummm, curioso” (textual)… es un buen dentista después de todo.

  • Lástima, me dijo, la caries llegó hasta la raíz y necesitamos hacer extracción. ¿Te la saco de una vez?

  • Me encogí de hombros, y dije-. Haga lo que necesite hacer -bien machito yo-. Al fin y al cabo, soy un hombre muy resistente al dolor. Si quiere no le ponga anestesia (eso último, es una libertad literaria).

  • Hijoeputa como dolió. Hasta se me salieron dos lagrimitas.

  • Cómo escritor en huelga creativa, he visto y leído muy buenas historias últimamente. Me han hecho preguntarme: ¿Qué se necesita para escribir algo así?

  • Se trata de buscar mi tipo de historia, supongo, me respondo numerosas veces. Tengo tantas historias pendientes, que primero he decidido terminarlas todas.

  • Finito.